de Cien Palabras de Jordi Cebrián
Hoy, mientras andaba hacia el trabajo, una excavadora que retrocedía
ha estado a punto de dar a un pobre hombre en la cabeza. Él no se ha
dado cuenta, ha seguido andando, sin saber que de inmediato en otro
universo no habrá tenido suerte, y yo habré tenido que agacharme,
sobresaltado, para ayudar al hombre, intentar reanimarle en un
esfuerzo estéril y terrible. Ahora escribo este cuento, pero hay otros
cuentos que se están escribiendo al mismo tiempo, en lugares que se
multiplican y se desdoblan en cada nuevo pliegue del destino, cuentos
reales sobre hombres que mueren de verdad.
dimecres, 20 de març del 2013
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